Nazaret Muñoz

En el cielo.

En el cielo.

 

La brisa se detiene y te acaricia

mis matices y orgullo se debilitan ante tu belleza,

ante tu voz precisa y hermosa

mujer,te vislumbro y en ti mi semblante reposa

en el dolor que he sucumbido

y se que todo está perdido.

 

El bello pecado que me ha tentado

me va a perder y terminar condenado

de aquella mujer

que no es dueña de su propio querer

de esa bella mujer

que tiene todas las de perder.

 

Como la hermosa luna llena

es el rostro de ella

como el amanecer de octubre

es su sonrisa e incertidumbre.

 

El espíritu santo nos estará esperando

en el cielo o paraíso estimado,

en la tristeza y en lo dolido

¿que sera de la piel que mi piel arropa?

Cuando de sus vestiduras se despoja,

¿que sera del cielo oscuro de sus cabellos?

Cuando para mi son solo increíbles destellos.