Empecé mi Camino dejándome guiar por este corazón, para encontrarme a mí mismo, con la espina en mi pecho, pisando los recuerdo mirando atrás solo para ver cuánto me alejo.
Con un boli y papel creando mundos con mi verso, del cielo una nube azul donde subo y empiezo a volar, tocando las nubes en lo alto, veo varios caminos con varias puertas, me acerqué a la realidad en busca de la verdad, observando en la fantasía, y pensé en quedarme aquí a ver mientras la persona atraviesa la puerta ¿a ver lo que pasa?
Una chica entra alegre, pero a salir veo sus lágrimas y entonces baje de la nube y me acerque a ella y dije —porque lloras— ella replicó—¡el amor no existe.!
Me fije que ella, aunque decía que no existía seguía tocando las puertas que llevan el mismo nombre, me aleje de las nubes y camine entre las personas, tan ciegas que no notaban que yo estaba ahí.
En mi pecho llevo una maleta con sentimientos guardados, no note ningún cambio, y me fije que todas las puertas ofrecían amor, y dije —¿qué es eso? — con duda me quede sentado pensando y una chica pasa y entra, me quede esperando.... La he visto salir con alguien más tomada de su mano y me acerqué y dije— ¿para dónde van? y ellos digiero—he y niño sabes dónde te encuentras es en la vida y la vida es un laberinto, donde te pueden tocar la puerta o tú la puedes tocar, a tocarla la maleta dentro de tu pecho se abre para darte el mapa y busca la última puerta, la felicidad.
La duda me daba vuelta en mi cabeza, camine y camine me pare frente de una de ellas, intente abrirla, pero a ver su cerrojo note que muchas personas ya habían pasado aquí, y me aleje, en el camino me topé con una chica, la única que me pudo ver, me miro y sentí un gran abrazo con su mirada y escuche— top, top y dije— rayos alguien toca en mi puerta ¿cuál es y donde estará mi amor.?
Ella me dice—hola te vez perdido, y dije— y tú que haces vas a entrar en la puerta, ella dijo— sí, pero no en esas, muchas son engañosas, yo voy hacía la puerta de la amistad.
Me pareció bien y dije— ¡te puedo a acompañar ¡— y el sonido fue más fuerte top, top. llegamos a la puerta de la amista entramos, pero no apareció nadie yo dije— dónde está la amista, —ella sonrió y dijo— tonto esa es mi puerta tu eres mi amigo, eres e único, y entonces la maleta dentro de mí se abrió y aprecio mi sonrisa, mientras más tiempo pasaba mi maleta me revelaba muchas cosas y dije— cuando iremos a la puerta de la felicidad, ella me miro y dice— que se ve que no sabes nada ya estamos en ella tú me haces feliz.
Y entonces la maleta saco un te quiero que se lo regale a ella, ella me abrazo y algo más creció, 4 meses visitando la puerta de amista y descubrí mi gran atajo a la felicidad.
Empezó la confianza, me conto todo de ella y yo de mí, hasta que llego e día, que alguien toca mi puerta llamada amor.
Fui a buscarla, pero no la el visto, entonces me fije que en el camino había un hilo rojo, seguir ese hilo viendo hasta donde me llevaría y me encontré frente de mi puerta y la note abierta y entre y la vi y dije— ¡qué haces aquí¡, como entraste si nunca supe de mi llave, ella me cuenta e secreto— es que tu llave me la diste porque la amista es un paso para el amor y por eso estoy aquí, ella me mira acariciando mi rostro algo extraño pasaba en mí.
El deseo despierta en mí, que con solo una pequeña distancia suele quemarme, la calidez que ciento, la tranquilidad que tengo a tomar de sus manos, ahora caminamos junto a paso de nuestra afinidad, abecés subimos a mi nube azul volando en el cielo nos solemos alejar de esta realidad y vivimos nuestra propia felicidad.