Anoche soñé con tus ojos infinitos.
Con tus labios armoniosos y endebles.
Con tu silueta fresca.
Estás aquí, muy cerca de mí.
Tan cerca de amaneceres y noches.
De sueños y palabras.
Ausente y vacía, como mi habitación.
En hondas lejanías habitas tú .
Cercanas distancias vivo yo.
¿Quién diría que las horas sin tí desangraría por mis venas?
Es irremediable que sienta tu ausencia las agujas del reloj.