¿Y qué si un día, como ella hacía,
salgo con un peplo
plateado y violeta?*
o si a la peineta
de color dorado
hundida en lo alto
de mi pelo cano…
le pusiera un moño
con seis lentejuelas
para que me digan
que me volví loca
como la urugaya
Juana*, que decía
que ella estaba loca
porque en sus manos
le crecían rosas.
Ojalá me digan
¡ loca,loca,insana!
y a mis dos poetisas
las tenga cercanas
*Alfonsina Storni *Juana de Ibarbouru