No hay dinero que pague lo que eres,
Eres ser invaluable e inmedible,
Espiritualidad impredecible,
Pues vives para el bien de quienes quieres.
Eres bondad. Virtud y el poder tienes
De arrebatarle a sombras invencibles
A quien amas cuando en la nada hundirse
Pareció, pero el dios que en ti medra lo retiene.
Es el amor sin precio ni medida
El que crece en tu alma y da la vida,
el que te hace capaz de lo imposible,
es el ser madre en cuya alma anida,
la excesiva bondad nunca extinguida,
la que mi vuelta al ser hizo posible