Me invade la soledad como en tantas otras tardes,
Y perdido en mi mente, tengo miedo de espantarte.
Tengo miedo de espantarte cuando te escribo
Y ante mi anhelo de charla no respondes;
Te habrás ya cansado de mi.
Tengo miedo de espantarte cuando se
Lo mucho que has llegado a conocerme,
Y se que nadie que tanto me conozca me habla.
Tengo miedo de espantarte cuando te muestro
Los pálidos versos de mi poesía delirante,
Y me planteó que cruzara por tu mente ante ellos.
Tengo miedo de espantarte cuando escribo
Sin que nada me detenga como un pobre condenado,
Y adentro me pregunto, ¿te estaré apabullando?
Tengo miedo de espantarte cuando dolido
Te cuento mis problemas sabiéndote gran consejera,
Y me pregunto si no estarás harta.
Tengo miedo de espantarte cuando anhelando hablar
Me desvivo por escribirte y no lo hago,
Por miedo a molestar en mal momento.
Tengo miedo de perderte cuando decidido a ayudar
Trato de estar ahí cuando tienes un problema
Pero no se, si se realmente ayudar.
Tengo miedo de espantarte porque eso se me dijo
Que tarde o temprano yo siempre hago,
Y cuando me invade la soledad por las tardes,
Y ni la luna, ni el sol, ni Dios, ni el diablo me contestan,
Terminó por aceptarlo, y tengo miedo,
De ya haberte espantado.