Quién ha visto a mi padre?
_Quién sabe por cual galaxia andará_
Si estará más viejo o más calvo,
Si de aquí se acordará?
Sí aún le acompañan sus virtudes,
O si su cara refleja la alegría
De caminar entre querubes, o si madruga todavía?
Quién me cuenta de mi padre, y de la bondad que poseía?
de su buen humor y su buen gusto
de querer vivir la vida cual si fuera poesía?
Que estará pensando? Que estará diciendo?
Cuánto diera por mirarle el rostro y
ver en sus ojos el reflejo de la gloria,
verlo esforzando la memoria cuando hable cara a cara con su Dios.
Hoy he visto a un ángel
que atravesando el universo vino a cumplir una misión,
y aprovechando la ocasión le he preguntado al fin por él
Le pregunté por un señor de anteojos blancos y de frente alada,
de pródigas canas y de piel arrugada
que siempre llevaba en su cara
la paciente mirada que acompaña al camarada
El ángel sonreído me ha dicho con aplomo que
lo han visto madrugando, cabizbajo y taciturno
recorriendo el universo, caminando por el cosmos,
medio silbando una canción y otras veces por Saturno.
Me dijo que lo han visto contemplando los luceros
al igual que las estrellas,
conversando con los santos sobre tantas cosas bellas.
Y preguntando e indagando a cada momento y cada instante
por aquellos que vinieron unos años ya adelante,
Por sus padres y los hermanos quién lo viera haciendo señas con sus manos.
Así se le ve_ Me dice el ángel_
abismado por la armonía celestial,
abstraído por el perfecto acorde universal,
donde no hay disonancias ni medias notas,
y no hay dolores ni derrotas;
donde las escalas son menores y los tonos son perfectos
seguro que para hacer mas dulce la morada de los muertos
. Sabe que llegó un día y no recuerda cual,
además no quiere hacer otra cosa que no sea caminar con Dios
y hablarle cara a cara,
y así poderle preguntar por muchas tantas cosas
como descubrir secretos y recibir los galardones
que en la tierra se le prometieron a lo largo de su vida por montones.
Si pudiera verlo una vez más tan solo una vez más.
Que de cosas le diría,
de lo que dejó atrás, de cuantas cosas se enteraría,
de lo que me preguntó un día decirle que ya tengo la respuesta que pedía.
Lo que se enteraría de su pueblo y su terruño,
de la escuela de música que se quedó tan vacía.
de los hijos y los nietos lo que me preguntaría,
de su casa, su patio y sus objetos cuanto le diría.
Si pudiera hablarle una vez más.
tan solo una vez más, cuantas cosas indagaría,
de los amigos que le recuerdan
que añoran su carácter, su paciencia y su alegría.
Como me gustaría, de veras verte conversando con Beethoven y Franz Lizt
Preguntar por Richard Wagner; por Tchaikovsky y por Berlioz
Por Giussepe Verdi; por Bellini y Massenet.
Por Debussy; por Bach y por Mozárt.
Por Stravinsky y Korsakov por Albeniz y De Falla
Y hacerles recordar la PASTORAL y el EL EMPERADOR
LAS CONSOLACIONES y NOCTURNOS
y el sublime canto De Micaela a Don José de la gran CARMEN de Bizét
Preguntar por el TANHAUSSER al igual que LAS WALKIRIAS
Por la PATÉTICA inmortal; el LAGO DE LOS CISNES
y evocar de LAS FLORES su precioso vals.
Comentar sobre la AIDA; LA TRAVIATA y El TROVADOR.
La portentosa FORZA DEL DESTINO
y la CASTA DIVA de la excelsa NORMA
y recordar la poesía sinfónica de LA MEDITACION DE THAIS,
o lamentar con RIGOLETTO ante su Gilda herida,
ajusticiada por él, su mismo padre.
Ahondar por EL CLARO DE LUNA y El REVERIE
Y la tradicional FUGA EN RE; por LAS POLONESAS de Chopin
Y LA TIERRA DE LAS SONRISAS de Lehár.
Por la CONSAGRACION DE LA PRIMAVERA y SCHEREZADE
y conocer el trasfondo de la SUITE IBERIA con el adiós morisco de De Falla
en su gran NOCHE EN LOS JARDINES DE ESPAÑA
y de TRISTAN e ISOLDA elogiar su triste final
cuando pensaron con la muerte la felicidad eterna alcanzar
Padre querido
cómo quisiera compartirte las cosas que contigo no he compartido.
Cuantas preguntas sin respuestas me han quedado por hacerte,
como el que te hayas ido sin enseñarnos más sobre la muerte.
Y quiero que sepas Viejo, que estoy contigo
cuando añores las madrugadas Decembrinas
y tus visitas furtivas a los mercados domingueros,
como si te hubieras propuesto ser el primero
en probar el humeante café tempranero.
Tal vez allá no haya golosinas ni tenderos ni baratijas
pero alégrate Padre querido que para tus hijos
las más finas sortijas son las que se extraen de las espinas.
Y tal vez también añores Papá
los Crepúsculos de tus noches Barquisimetanas
cuando muchas veces antes de parir la mañana
con tus serenatas mudas alegrabas la ciudad de madrugada.
¡Ah! y tu querido San Carlos
con su calle Alegría, la Cruz Verde y el Cerro San Juan,
el bucólico Pozuelo y los remansos del Mapuey,
te diré que siguen adelante como los viejos recuerdos
no resistirías si te dijera que también con ellos
la desidia, la inclemencia y el desdén
han hecho como quien quiebra un límpido espejo.
Que dolor tan grande da aceptar la triste realidad
que las cosas que contaste y las lecciones que impartiste
con triste resignación al olvido pasarán,
porque no estarás para hacerlas recordar
para insistir en los nobles ideales
y dar siempre el mejor ejemplo de enseñar más sobre el perdón,
combatir a cada instante cualquier seña de rencor,
y sobre todo lo que fue siempre norma de tu vida:
la educación sin dolor, la crianza sin violencia,
y ante la búsqueda ciega del buen árbol del honor:
la amistad con renunciación.
Y te prometo camarada:
que si algún día voy al Viejo París,
Como tu me pararé en las Riberas del Sena y en medio de Las Tullerías
sentiré la admiración que te invadía,
que de no poder lograrlo me daría inmensa pena.
Trataría de afinar mi oido Para ver si como a tí
de algún vodevil cercano me llegan los acordes lejanos
de la inolvidable VIE EN ROSE y el no menos galo CŽ EST SI BON.
O tal vez llegue a estar algún día frente al Danubio Azul en Viena,
para vivir contigo la misma decepción que sufriste un día
que en vez de Danubio Azul, la pena de encontrar un río negro
que no inspira sino desilusión.
O quizás un día vaya como tu a la Germania
con su Selva Negra y sus valles del Rhin.
trataría de emular tu vista por encima de las cumbres,
en el horizonte Teutón para captar la inspiración
que a todas luces engendró a los ANILLOS NIBELUNGOS
y EL LOHENGRIN con su FUNERAL DE SIGFRIDO
y el lirismo de PARSIFAL en la mente del compositor inmortal.
Y si me alcanza corazón podría revivir contigo la impresión
de sucumbir ante el influjo sobreagudo de una Tiple,
Prima Donna de función en la vetusta Scala de Milan,
albacea de prestigio de Rossini, Mascagnni, Puccini y Mayerbeer
para los aplausos y vítores rancios de su TOSCA, IL SUOGNO y SOR
ANGELICA TURANDOT, LA BOHEMIA y la “giapponessa” MADAMA BUTERFLY.
O tal vez mejor, por informal
celebrar igual que tu en alguna plaza de Sevilla
los redobles del GALLITO y el gitano GATO MONTEZ
frente a un autentico clarete manzanilla.
Máxima expresión del buen gusto en Aranjuéz.
Y en La Puerta del Sol, o en la Calle de Alcalá
requerir de una oferente violetera su milagroso RELICARIO
y porqué no también sus mejores CLAVELES DE ESPAÑA tan regios
Como los de acá y tan majos para llevar a tierra extraña.
O en Granada con su Alambra, ante la solana Sierra Nevada
bajo el verdor de los encinos en la dehesa de los pastizales
recrear al calor de una autentica y bullanguera Zambra
Cada línea y cada verso de mis VIOLETAS IMPERIALES.
O sufrir a dúo contigo entre los requiebros resentidos de DOÑA FRANCISQUITA
y el giro oscuro que ofrece el TRUST DE LOS TENORIOS
en afinada comparsita.
Entre la dulce y gangosa melodía de zarzuela
de la gran LUISA FERNANDA y el verso arrepentido
del NO PUEDE SER de aquella TABERNERA DEL PUERTO,
viva representación de los ayes que deja el buen querer.
O tal vez los acordes imperiales de la LEYENDA DEL BESO
hasta la ternura acompasada de la MADRE DEL CORDERO
terciando muy aragonés y animoso para eso en cualquier tablao de Madrid
un jerez de los de allí, o un buen Valdepeñas de los del valle aquende el Duero.
¡!Padre Querido! ¡Mi entrañable Viejo!
Este próximo Diciembre me pondré tu gabán y tu sombrero
desempolvaré tus humildes partituras
trataré de solfear algunas de tus canciones viejas
para ver si mitigo el dolor de la ruptura.
Y sería para mí, totalmente deslumbrante, copiar aquí,
al mago de la rima y los sonetos del Amor a Don Amado Nervo, para ti:
“ Sería para mí bastante si detrás de una estrella perdida puedes leer estos versos que te escribo distante y digas este este es mi “ hijo” amante que nunca me olvida”
Y bien "llegamos a la coda", como llegó tu vida un día,
cuando quedaban todavía, muchos más registros
que querían sonar para la perfomance toda,
pero en medio de una escala cromática de inmensa resolución
El Director Supremo hizo un levare manteniendo un calderón,
cuando la melodía de tu vida iba rumbo a la repetición.
Y en un pianíssimo adaggio una madrugada fría
lejos de tu casa cuando en otro lecho dormías
llegó el final de fiesta que ponía fin a la función...
Las luces se apagaron ya no hay más conciertos que ofrecer
los atriles se han cerrado y los instrumentos se han guardado la
sala ha quedado completamente sola y fría
"El músculo no duerme, ni la ambición descansa"
se han retirado a su nostalgia y a su melancolía.
Y el tañír de las campanas de la iglesia
testigo fiel de tus retretas en eco mudo se ha quedado
pero en lo profundo de mi corazón
reverbera eternamente la onda de tu diapasón.
Hasta otro día querido viejo...
F. Barreto Barquisimeto 07/04/2004