Gerson E. A. Arenivar

Simples Letras

 

Es por la lejana y acostumbrada I

de la imaginación,

que juega con mis sueños

porque no estás.

 

Te pareces a la triste y pesada L

del lamento de mi alma,

de la Luna ensangrentada.

 

Pero me duele en las entrañas la U

de la única melodía

que me habla de ti

en el último ocaso del mundo.

 

Aunque pienso más en el vacío de la S

del último suspiro

que sella para siempre la muerte

con una palabra entrecortada en los labios.

 

Es que he vuelto a la acostumbrada I

de la infinita pasión

y de a interminable historia.

 

Fosforece el último rayo de luz de la O

como cuando se oculta el Sol,

para dar paso a una noche sin estrellas

inundada de oscuridad.

 

Al final se ha clavado en mí la N

porque nunca te podré tener;

porque eres solamente un sueño;

porque eres mi lejana ilusión.