sabor de mi suelo patrio,
sudor de hombre campesino,
aroma de chapolera
símbolo de pueblo nato.
esfuerzo de nación buena
que sueña un futuro sano
hecho con manos que anhelan
para el pueblo colombiano,
la paz en torno al aroma
de una taza de café
del que tan solo se ve
en las faldas de mi tierra
que espera con ansia y fe
vivir y soñar sin guerras.
¿Quién será de las dos la maligna,
la brujita que danza en su escoba
y risueña se goza la vida
entre bromas y sustos y cobas,
o la iglesia que la quema viva
cual si fuera lunática loba
de indefensa ovejita asesina
¿o en rediles perversa ladrona?
no lo sé, pero nunca vi brujas
torturando a monjitas cartujas
ni invadiendo naciones endémicas,
mas si se dé indecibles torturas
propinadas por monjes y curas
a los pueblos nativos de América.