quisiste volar muy alto,
pero las alas te cortaron,
condenándote a caminar
por la indolencia de esta humanidad.
trataste de encontrar amigos,
pero solo hallaste enemigos;
pedias a gritos comprensión,
mas solo viste incomprensión.
la humanidad te es un huerto
mustio de corazones de hiel;
ignoran tu calida mirada,
tu sonrisa amable y candida.
tu belleza pasa desapercibida;
eres una flor mas en esta floresta sin vida;
tu candor es un eco timido
que se pierde en el silencio infinito.
de reojo miras a los ojos
de esta humanidad,
intentando encontrar
lo que nunca podras encontrar;
solo ves lágrimas contenidas
de almas abatidas.
añoras esos dias de antaños
cuando volabas por entre las nubes, cerca del Creador;
hoy solo caminas por las calles
de este mundo de espantos,
aterrado por la desesperanza, el desden y el desamor.
te sientas en la banquita de una plaza, y lloras,
al contemplar la indiferencia del mundo,
la cara hostil de esta humanidad.
te conmueve la mirada triste
de un niñito que implora
la calidez de un regazo femino y materno,
caricias de una Madre que no tiene ya.
se te contriñe el alma al ver
lo que tus ojos no quieren ver
un anciano pobre buscando
por entre las basuras, un trozo de pan,
y nadie de el se ha de compadecer.
su suceso te indigna y te parte el corazón:
un \"hombre\" golpea a su mujer en cinta,
hasta dejarla inconsciente en el suelo...¡ay Dios!
¡por que nos olvidaste, Oh Dios Mio,
por que nos olvidaste!,
porque no juzgas a este mundo impío,
y liberas a los que sufren del debacle.
caminas por entre las gentes,
y tus ojos lloran desconsoladamente
ellos te miran, mas no entienden
la tristeza de tu alma clemente,
de tu alma clemente.