Y vendrán días
de caos y de guerra...
de manipulación, desengaños
y de abusos,
mas la mano
esbelta de la diosa...
surcará triunfante
el cielo azul,
como una blanca
primavera...
jamás enardecida
por el oscuro
heraldo de su boca.
Y triunfará la vida
ya sin medida...
en el encarnecido
labio de la rosa.