jacqueline Sellan

Poema 27

Caballito de balancín

que te encontré en el desván

con las patas rotas

ya nunca galopaste.

La pintura nueva se secó en el tarro

tu corazón de polillas voló en el viento

y el hacha del sol

te dio el golpe de gracia

cortando tu cuello elegante

de un tajo.

Pero decapitado y con las patas rotas

caballito de palo

galopas

galopas

en las inmensas

praderas de mi canto.