lo mio no fue suerte,
tampoco casualidad,
Dios te tenia para mi,
y esa es la verdad.
lo mio no fue casualidad,
ni menos el destino,
fue Dios que asi lo quiso,
cruzarte en mi camino
para ser tu, mi dulce felicidad.
fue Dios que asi lo quiso
unir nuestras vidas,
en torno de este amor bendito
que le da una razon a nuestras vidas.
lo mio no fue el destino
tampoco coincidencia,
fue Dios que asi lo quiso
unir para siempre nuestras vidas
y amarnos con pasion inmensa,
con pasion inmensa.