Por un jardín sin flores
camina un virus que mata.
El agua corre desnuda
y oscura se pinta en alba.
Aquí no brilla la luna,
aquí se llora y no canta.
Los viejitos no tienen nombre
y los niños tan solo cantan.
Por un jardín sin flores
un virus pasa con calma.
y en un nido postrado
duerme un alma descalza.
Aquí callan las voces
y un canto mudo avanza.
Sin sumarse al silencio,
estamos Los Poemas del Alma.