No te alejes tanto de mi
no te lleves las ultimas palabras de mi aliento
ni escondas los sentimientos
debajo de la cama.
Llama a grito ciego
al futuro mas arrepentido
y golpea las puertas de los nuevos comienzos
sin ninguna gota de vergüenza
haciendo de tus manos suaves paradisíacas
el juego de la verdad mas insolente
ser uno mismo, por sobre el otro y viceversa.