Vale la pena volver a empezar
y del vaivén de las olas dejarse llevar
e internarse en lo profundo del mar
sintiendo sus corrientes en la cara rozar,
como suaves caricias que el amor da.
Vale la pena dejar atrás
todo lo que daño quiso causar
abrazar nuestras almas y el amor albergar,
en mi mundo, en tu jardín
donde las mieles se dan
y el amor se puede esculpir
más nuestras pasiones anclar,
en una ensenada de paz
donde el amor nade en libertad
y se puedan nuestros ojos encontrar
en una mirada dulce de eternidad.
Vale la pena dejarnos amar
y que el tú y yo se pueda integrar
en nuestras almas con tranquilidad
y a nuestros sueños alar.
Yamila.