Surge la aurora
entre quimeras...
y aún de boca
se encela el mediodía,
amor licuado
en su misterio...
desnudo ante los labios
que la amaron.
Nació de éter
y de esencia...
y es de nácar
su pecho zozobrado,
razón...
de toda mi ventura,
zaherida por su beso
enamorado.