Y al quedar desamparado,
Sin un ser en quien confiar
Sólo me quedó buscar
Sincero amigo a mi lado;
Lo encontré bien encriptado
En ese libro sin par,
Donde pude disfrutar
De la paz que había buscado;
Eran palabras serenas,
De valor universal,
Y, a la vez, acciones buenas
Que expresaban su ideal:
Nunca hay personas ajenas,
Todo es unión fraternal…