Kinmaya

El Ășltimo beso

 

El día oscureció tan rápido, 
que mis parpados dejaron de moverse, 
mis ojos desorbitados se clavaron en el espacio, 
la mirada se me hundió entre las tinieblas, 
algo nunca imaginado, 
la pesadumbre cayó tan veloz como un rayo, 
tan repentino como un grito engullido por el silencio.
Luego; el calvario...el sabor de tus labios,
es todo lo que me quedo de ti,
la ambrosía de tu último ¡beso ¡