Quisiera fundirme en las olas,
como los riscos que caen al mar
y huir a otro lugar.
Mi alma se desmorona a cada instante,
y al olvido, sin arena ni mar,
marchita envuelta en oscuridad.
Es el tiempo mi mayor miedo.
Entre más se acerca la noche,
pululan hambrientos mis demonios,
despiertan ansiosos mis fantasmas
Son mis fragmentos mis enemigos.
Entre más alumbra la luz del día,
aborrezco ferviente mi reflejo,
y crece voraz mi deseo suicida.
Llevo anclada en el alma
el màs perverso resentimiento
y su podredumbre inunda perezosa
cada rincón herido de ella.
Tan añejo… me embriaga, me consume,
uno creería que es bueno,
y al menor indicio me desecha.
y en la locura, me pierdo de nuevo.
… Siempre me pierdo, en mis fragmentos.