Rafael Escobar

\"ANGEL PERDIDO\"

 

Como la luna, con nocturno hastío,

lleno de sueño, y luz fosforescente,

veo su rostro terso y refulgente,

igual que un ángel con fulgor impío.

 

Miro en sus ojos, de pasión un río,

y su sonrisa de pecado es fuente;

mas cubro el alma, del deseo ardiente,

con fresco manto de otoñal rocío.

 

Fuego mortal de su figura emana,

que invade el cuerpo con ardor divino;

y con su boca de sensual gitana

 

ofrece siempre su preciado vino,

el cual se bebe en ánfora profana,

de su carnoso labio purpurino.

 

Autor: Aníbal Rodríguez.