Es más que el tiempo postrero. Dudas,miedo, incertidumbre, zozobra, miradas cobardes.
La calma es de unos pocos que aprovechan el momento, como aves de rapiña que no dan lugar a que el cuerpo inerte descanse . Fraguando conspiración entre si, para ocultar un verdadero propósito. El brillo de el oro hace de aquel infierno un paraíso para ellos. Como podría el maestro. JOSÉ EUSTASIO RIVERA . pasar por alto la desventura de esas pobres almas que con gran similitud a su relato \" la vorágine \" se despojan de su cuerpo olvidando el tormento que fue tal maldición en sus pulmones y que decir de su cordura arrebatada por la fiebre.
Donde el calor de hogar es libertad , más la perilla es el límite , después de allí un mundo indolente que no perdona. Es la ira de Dios, que te muestra lo verdaderamente real? O la naturaleza agonizante desafiando al mundo con sus ultimos suspiros.