Pyck05

AQUELLAS FRESAS...

Aquellas fresas,
robadas a tus labios,
me sorprendieron.

Llenas de un néctar
de miel y de caricias
muy agradables.

Sabor a ti,
frescura inenarrable,
mi hermosa huerta.

Me estremecieron
la pulpa con su carne,
rica y sabrosa.

Y en ti, pensé,
pequeña mariposa,
mi competencia.

Hoy son mis labios
llegando hasta las fresas
los que así versan.

Pero mañana
vendrá la primavera
y tú con ella.

Te quedarás
a solas con las fresas,
y te veré.

Serán mis besos,
ladrones, y mis sueños,
irán contigo.

Rafael Sánchez Ortega ©
20/02/20