Hola chula,
te podría hacer un verso
tan solo por un beso
en la mejilla,
en esa mejilla
color de niña.
Si te animas
por dos versos
una dulce caricia
de quien te admira.
Por tres versos,
delicada pasión de mi vida,
sólo será un leve abrazo,
pero muy tierno,
y la opresión animosa
será cuando te escriba
una estrofa.
Como verás,
la vehemencia es muy bella
entre poemas que le cantan al amor,
y por buena disposición
que en tus ojos veo,
hay deseo y hay pasión.
Pero antes,
sin precipitación que espante,
para no adelantarse al ritmo,
si gustas una estrofa
con flor y guirnalda,
¡Oh! mi bien amada
sólo dos besos
en la boca
te doy.
Pero decidme bien
dulce encanto,
si el poema lo quieres rojo
o por tu gracia lo deseas azul.
Un poema con una estrofa
de color rojo es un beso
más profundo, que llegue
hasta el fondo donde
mi corazón se derrita.
¡Oh! preciosa,
en tu mirada leo
que preguntas con insistencia,
¿cuántos poemas y versos
por un momento…?
¡Ah! por esa delicia…,
cuantos versos no te cantaría,
cuantas estrofas
cuantos poemas
yo no te daría.
Son muchos mi bien amada,
son demasiados,
pues el tiempo
se nos acabaría
en decirlos,
y en esa pasión
por cumplirte
con las ganas
me quedaría…