Hoy, mirando hasta ese cielo,
abierto y con negra nube,
todo cuanto me contuve
liberaré cual anhelo;
les gritaré que te quiero,
y me duele que lo dudes,
y te pido que me ayudes
porque, en verdad, desespero;
eres mi única esperanza,
me arrebataste el amor,
y con él todo confianza;
y al ver apagar las llamas
de mi amante corazón,
quiero saber si tú me amas...