Te dedicaría todas las canciones de este mundo
para que comprendas mi amor hacia ti,
solo aquellas que con su letra
te hagan sentir más que feliz.
Si pudiera te bajaría las estrellas, la luna y el sol,
para que veas que con ellas
tu belleza no tiene ninguna comparación.
Te daría todo el oro, y las gemas preciosas,
pues su valor a tu lado las convierte
en unas viles y simples rocas.
Haría que tu sonrisa
jamás desapareciera,
y que sientas que la alegría
nunca más es pasajera.
Que en tus ojos solo se reflejen
las maravillas de esta vida,
y que en tus sueños aparezca
lo bonito que es vivirla
¡Ay mi dulce amor!,
¡ay mi niño amado!,
¡que no haría yo por ti!
para tenerte a mi lado.