Cuando el estruendo termine,
El silencio retará a mis pupilas.
El caudal de mis ojos será sequía,
Y la almohada que cae en mis sueños
Reescribirá los versos que empecé
Y nunca terminé.
Cuando el estruendo termine,
El reloj,
No llorará mis penas en su pecho
Triste y desolado.
El tiempo dejará de ser frío,
Y la música
Dejará sus boleros
En mi falda rota y deshecha.
Y cuando el estruendo termine,
Estaré acariciando el aurora
con los párpados cerrados,
Porque no hay peor estruendo
Que la vida misma....
Deborah Silva
9-04-2020 1:15 am