Jueves Santo , día once de nuestra cuarentena , empiezo este día con un Padre Nuestro , recordando a mi madre que presurosa , nos alistaba para visitar nuestra capilla y seguir a la procesión .
Muchas cosas no entendía pero lo disfrutaba , ese amor, ese entusiasmo , ese fervor de mi madre por la Semana Santa , se veía que lo sentía en carne propia .
Ya en la Noche la visita a los 7 templos, donde no importa el estrato social, entre pobres , o ricos , unidos por un solo motivo la pasión de nuestro señor Jesucristo, pero lo que más me gustaba , lo recuerdo bien ,que al final de tantas misas nos llevaba a cenar platillos tradicionales de mi pueblo .
Tantos recuerdos, que en este silencio se añoran , hoy, entre el dolor y tristeza de ver algunos vecinos, o conocidos que han perdido la batalla , contra este mal que azota y cada día con más fuerza , entre el dolor que sentimos , al ver que la pesadilla va en aumento .
Jueves Santo caminando con El , viviendo nuestro propio vía crucis , momentos tan duros que nos a tocado vivir , instantes de perplejidad dónde millones de seres , hemos sido detenidos por un mal que nos rodea
Jueves Santo, Perdón , y Humildad, calles solitarias , silencio absoluto , solo el nombre de Cristo las recorre en pasos lentos , cargando la maldad humana , sabe de su muerte , sabe de la Traición, aún así avanza , sabiendo que nada será en vano .