jesus alberto porras

Su piel como un pergamino

Solo fluyen como venero

al escribir con mis manos

en tu pecho

mi dedo es como un pincel 

queriendo dibujar

en la misma piel

de la señora mía

su piel es como un pergamino

 con mis besos 

tatúo  en el más fino papiro

y quedará plasmado mis ósculos

en todo su cuerpo

que cuando pase el tiempo 

 no se podrá desprender

de mis caricias y encuentros