Rodrigo A. Alvarenga

Noches de Cuarentena Pt 3

Me hace falta

perder la cordura

en tu mirada. 

Me sobra

alucinar tu sonrisita macabra

en plena madrugada.

 

Me daña

pensar que de pronto

olvidaré lo perfecto de tu rostro,

y que,

 a poco a poco,

estaré deleitándome con otro.

 

Pero…

-en parte-

me alivia

el posible fin de esta agonía;

de amar a quien no debía.