A donde huye el amor en este tiempo,
donde se escondió que lo necesitaba,
una vez más cambiaron los sonidos de mis cuerdas
y volví a llevar una vida desafinada.
Da miedo llamarlo por su nombre
porque hace estragos en el alma,
el amor imposible tiene diferentes caras,
solo no fui precavido esa vez en la mañana.
Fue imposible que nuestros brazos
se hicieran el amor y nosotros en el medio,
fue imposible al dormir no escuchar su voz
que aclara la forma en que se concilia el sueño.
A donde huyo el amor en estos tiempos,
donde se escondió que lo buscaba,
una vez más es soledad, abandono afectivo,
egocentrismo y quijotismo.
No quedaron si no goteando
mis ojos en el claustro.
¡¡Ciega en el paraíso!!...