Pasan los días, las horas, cada esquina de este cuarto parece que se cierran.
Aplastando las esperanzas de que todo vuelva hacia como era ayer.
Las nubes pasan y no vuelven jamás.
Los rayos del sol sólo me pegan menos cada día.
Ya no recuerdo el exterior.
Me refugió entre mi almohada y las sábanas.
Sueño que estabas tu...
Que te veía a los ojos y me preguntabas, ahora que?
Y me decía es hora de despertar.
Me gusta soñarte pero mientras más tiempo lo haga mas doloroso es el amanecer.
Veo el vacío y parece no tener fin.
Cada rincón me aprisiona.
Ya nada es nuevo para mi
Añoro tanto el ayer.
Ahora entiendo a los mayores de 30.
Por que todo era mejor antes aunque no lo fuera.