Humano pordiosero,
antaño todo luz de amaneceres,
hoy por sombras caminas,
lúgubres callejones tenebrosos
y las almas en ruinas
hablarán de tus pasos dolorosos.
Un camino es la vida
pero los años pasan, no perdonan
y gozarás sonriendo
subiendo por quebrada, cerro y monte
mas bajarás muriendo,
cuando veas el fin de tu horizonte.
Pero... ve con firmeza
dibujando y tejiendo tu futuro
y tendrás recompensa
a tu lucha constante, encarnecida;
con gratitud inmensa,
te ha de saber premiar siempre la vida.
Avanza jubiloso
aunque el camino creas que es muy largo,
lleva en ti la esperanza
de vencer al tirano e inclemente;
con la firme confianza,
que la luz brillará sobre tu frente.