Fernando?

Mujer amada

Cuando las nubes vienen y van, en ese instante en el que día parece terminar, te muestras, mujer amada, para mí.

Después de una jornada larga, abundante en dificultad, con tantas complejidades vanas, agradecería tenerte aquí.

Si hoy fuera mi cumpleaños, mi deseo serías tú. De otorgarse una petición bajo mi nombre, pediría unas velas y tu voz.

De habitar en un mundo irreal, en una historia sin final, donde las fantasías fueran una posibilidad, la simplicidad bastaría.

Han habido noches bajas para mí, he caminado por el inframundo, aún con un nudo en la garganta le hablaría a todos, de ti.

Desde aquella última vez, el vagón, la estación, tú y yo, tomados de la mano, tenerte siempre será mi satisfacción.