Escribir.
escribirte a ti, beberte en letras,
domesticarte como aquel zorro añorado,
sin tantas vueltas.
La flor de loto que muere a cada instante
temerosa del silencio
porque entre las mas profundas ausencias verbales
te encuentras tú.
Fruto del amor pausado,
de la imagen estática que pudo cubrir mi sueño,
mas ahora que lo deja tan callado
sin noticias que ya no agobian.
Melodías escandalosas
que derriban la emoción,
que ya enfermo el pensamiento,
no sabe ni quien soy.
Y estas tú,
muy al fondo reprimido bien guardado,
prevengo al pensamiento en cuanto llegas,
te dejo ir despacio.
Bea Ramírez