Quizás algún día te mires y sientas tu reflejo en mí, te abracen sin sentir y conozcas en tu propia mente lo que es esperar una respuesta...
Ojalá alguna vez te besen sin amor, como a tantas habrás besado tú, y te suelten la mano al borde del precipicio cuando de verdad necesitabas sujetarte...
Que te quedes en espera de un teléfono esperando palabras que no llegaron, que escribas poemas que nunca lean, que publiques canciones que jamás escucharán, te pidan una última oportunidad y te dejen solo, cautivo de tu soledad...
Ojalá algún día salga de tu boca una despedida pero apretando fuerte los labios para que la gente no vea como te rompes, y esperes por un tiempo que se dé cuenta de que sí merecías las pena y que te aceptan tal cual, para luego decirte que no eras suficiente, y te engañes pensando que así eres feliz...
Ojalá mires tu reflejo en cualquier parte y entonces, te acuerdes de mí... no, no quiero nada malo para tí, pero ojalá algún día te enamores, pero de alguien como tú...
Con todo ésto quiero decirte que no te enamores de mí, porque diciéndote la verdad yo no lo haría, yo no entiendo de planear un futuro y no sé cual puede ser mi próxima parada, me subo a las repisas y me dejo caer al vacío como si de un gato con siete vidas se tratara...
No se te vuelva a ocurrir enamorarte de mí, que yo no soy de querer, simplemente amo lo que hago porque quiero lo que siento, con tan intensa locura, que si me sueltan podrías comprender lo que te cuento...
Besos y abrazos me sobran, me guardo los recuerdos, y en la distancia hasta pude sentir tus caricias, no te enamores de mí, porque no sé de querer, todo el querer mío es poco para lo dispuesta que estaba a todo lo que tenía que ofrecer y la verdad que no te conviene alguien así...
Te cansarías de sentirte amado, sin caricias huérfanas, desayunos antes de que saliera el sol sin temerle al compromiso, pero... no te enamores de mí porque ahora ya no temo saltar por el abismo y ya no soy para tí, hazme caso, tú no buscas ésto...
Alguien intensamente encajonada en su locura que recorrería kilómetros como en un pasado para poder intentar verte unos pocos minutos, aún a sabiendas que se iría con el corazón hecho pedazos y ya no se podrían recomponer...
Todavía tengo el corazón tan roto y el alma llena de costuras cosidas con pedacitos de fotos sin promesas y una vida de frases incompletas que siempre acaban en tí...
Por todo ésto, no te enamores de mí, porque perderías toda lógica, y entrarías catastróficamente en un perfecto caos de incoherencia contigo mismo, desfiaríamos al reloj y al calendario y no debes vender tu alma de ésta manera para dedicármela a mí... a menos qué... seas otro loco que pueda reactivar un corazón que hace mucho tiempo cerró porque se rompió...