Abrumado, y con la angustia cavando en mi alma,
una pesadumbre inesperada invade mi semblante,
mi sombra abraza mis retorcidas entrañas entre el polvo,
un ahogo casi perpetuo cae desde un mundo de asombro.
Mis labios se estremecen entre el insomnio y el sueño,
un humano lóbrego recorre tiempos de sabiduría ausente,
infinitas preguntas se agolpan en los abismos de la ignorancia,
líderes guerreros con el alma abrumada miran sus egos.
Lágrimas se hacen ríos ignotos entre almas sin voces,
un rezo que suplica en corazones desolados por la angustia,
muchos sueños muertos en un mañana de ánimos ruinosos,
un mundo mejor veo asomando junto al sol que me ilusiona.
Un nuevo horizonte nos guiara hacia un lugar mejor,
la fe puesta definitivamente en el alma humana renacerá,
los días tristes nos llevaran hacia el amor universal,
mantened la fe en un humano que se yergue hacia el cielo,
un atisbo de esperanza se esconde detrás de las estrellas.