Cuando una estrella muere
Brilla más el universo
Cuanta más penumbra deje
El vacío es más perverso.
Puedes verlo en mis ojos
Cómo te vas destruyendo,
Si brillan más los reflejos
Es porque te estás muriendo.
Sigue aquella estela que baja
Arrasando hasta quemar la piel,
Restos de polvo, sabor a salado,
Cuando un día supiste a miel.
Suena el silencio a locura
Justo después de estallar,
Nunca supiste que serías tú
La única estrella de mi recital.
No intentes pegar mis cenizas
Que un día fueron parte de ti,
Los trozos se pueden recontruir,
Pero el polvo, con el viento se tendrá que ir...
Primer poema. R Gherhes