El tiempo que me acompaña
algún día me dejará,
con él, yo quiero marcharme.
Con el tiempo.
Hasta el final.
Final que no tiene el tiempo
al que me quiero aferrar.
En él quiero cabalgar.
Yo corro.
¡Que no se escape!
Con el tiempo quiero estar.
Lo atesoro,
lo acaparo,
y lo intento disfrutar.
Se me escapa,
lo persigo,
se me pasa sin pensar.
Y lo busco.
¡No lo encuentro!
¡Es el tiempo que me falta!
¡Aquel, que perdí en pensar!
Soñaba tiempos mejores
y el tiempo siempre es igual.
No es malo,
tampoco bueno,
solo pasa sin piedad.
No le alegra,
ni le apena,
el que te quedes atrás.
No siente,
nada le altera el ritmo…
Ni el desgranar,
su inmenso reloj de arena,
con los granos por contar.
Un día dirán que fuí,
que yo estuve por acá.
Seguirá pasando el tiempo
hasta mi rastro borrar.
No recuerdes el pasado,
eso es error garrafal.
El pasado nunca existe,
solo el que está por llegar
es tiempo real y firme,
el que te acompañará,
en tus días y en tus noches…
Pero ni un instante más.
SERAFIN ZAPLANA ESTRADA