Anda borrico sin tener demora,
antes de que la noche venza al día,
ve de prisa que en cinta está María,
y a Belén queda un trecho. Y es su hora.
Que del orbe será su Mediadora.
Sigue a la estrella que su luz te guía,
que va a nacer del mundo la Alegría
y la muerte será vencida ahora.
Cantan los Ángeles, al rorro, en coro,
los pastores entonan sus loores
y unos Magos incienso, mirra y oro
le ofrecen. A María, bellas flores.
Y Ella nos dona su mayor tesoro:
el Niño Dios, Amor de los Amores.