Primeros prismas sean por collares, una roseta suave volviendo a la presencia del desdén… sueñas un pasaporte virgen de tejido infantil, las princesas ahogadas a sonar los hurones de fuego mil veces constelados, mi expresión frecuentada de nieve ha retenido gotas cuadradas de prisa palpable, una bañista amarilla comienza la tarde con torres sepias, ahora dos pegasos alcanzan remos de palisandro y un signo de sueños. Mi construcción tiene brazos de páginas extrañamente prisioneras, oigo inscripciones que ocultan misteriosos números: son florecientes ventanas al oído del cielo. Hacen decifrar pavimientos antiguos suspendidos por una muralla metálica y silbas de vajilla, cuando noche simbolizamos un estribo de arroyos donde suena prisiones escarchas, el tiempo (no preguntéis!) Tragaluz firmado se cumpre del velo como un pan dorado de leño a la deshonra golondrina.
Guidemerson C. do Prado
Creditos el la imagen: Max Ernest