Mientras afuera las hojas caen
adentro el insomnio le gana al reloj,
los llantos resisten, se guardan, no salen,
y el viento con fuerzas me acerca tu voz
El frío empaña los vidrios de casa
las madrugadas serenas alteran mi temor,
la soledad presente como única amenaza,
confunde los defectos del odio con la belleza del amor
Por las tardes la humedad engaña el autoestima,
en la mañana dejo que me despierte el sol,
y por las noches es la memoria quien se anima,
a escarbar en el pasado sin ningún rencor.