Joel M. Tapia

Ojos de fría ausencia

El pájaro cantó en la noche,
tenía un ala rota
y en sus ojos, fría ausencia.

El pájaro cantó en la noche,
en medio de las soledades
cuando la mas densa oscuridad
invade lo profundo del alma.
El pájaro cantó en la noche,
cantó el exilio, cantó la angustia,
las palabras que nunca dijo,
las que jamás volverá a decir.
Cantó el absurdo olvido
con sus ojos de fría ausencia.
El pájaro cantó en la noche,
y llevaba en sus entrañas
una tarde de rosas blancas
y de rojos puentecillos,
un mediodía de amores lozanos,
pero en sus ojos, fría ausencia.
El pájaro cantó en la noche,
y su voz empujada por el viento
se coló por las grietas
de los corazones tristes
que entendieron su canto.

 

El pájaro cantó en la noche,
cuando frenó su vuelo...

Tenía un ala rota
y en sus ojos, fría ausencia