¿Sabias que eres mi complemento, hombre?
A cualquier parte del día son necesarios tus besos,
tu abrazo que me desvela
y esa sensación que cae despacio y agita mi cuerpo.
Eres mi complemento,
quien diría que si no estas me siento rota,
como aquello que me falta
como esa orna que completa tan bien a mis deseos.
Y no busco otra cosa,
que me quieras y me ames,
ser la mujer que a pesar de todo,
viva hasta el final contigo.
Y si la vida nos regala un hijo,
mi deseo de antaño al fin cumplido,
que tenga tus ojos y tu boca,
que lleve tu nombre y apellido.
Eres tú mi complemento, hombre,
mi bello atardecer,
la magia que cae entre dos cuerpos que se unen,
como un fuerte vino, el mejor café.
No hay nadie que comprenda,
mejor como tu piel
tu boca que me llena,
un sabor de gran placer.
Y no digo otra cosa, hombre,
gracias por hacerme tanto bien
por darme mas de un motivo
y mil razones para no caer.
Bea Ramírez