El,
un día emergió,
su sombrero y su extravagancia,
en sus manos
un abanico de cartas,
baraja hecha explosión.
vuelo de sugestión,
realidad hecha ilusión.
ella,
un pañuelo sostiene su cabellera
gira al viento,
alma imaginada,
palabras de amor imaginada,
locura libre,
más libre que un pájaro
más libre que el alma,
cuando se comparte,
quizás
la única forma de alcanzar
instantes de felicidad,
es amarrarse a la locura…
esa locura que todo lo sostiene,
esa locura que se escapa cada día
en un sueño, en un beso,
locura un espejo,
única mirada, más mirada que
las estrellas en las manos
que no escapan ….
Como el día y la noche
el amor y la locura se enredan,
Depende del tiempo,
Depende de la pasión más libre,
Como un nido hecho de magia,
Somos aprendices de la intimidad
que traspasa hasta el alma.
Como niños desconocemos los peligros,
estación de vida más libre,
atada al primer llanto.
Ya no hay preguntas,
Solo una oración
Parece que el amor
tiene escondite en la libertad,
cómplice de la locura,
vuelo nutriente
de la felicidad.
En este río Calle Calle,
juegan por la costanera,
un juegos de la alegría
el eco se desliza,
en la burbuja más íntima,
entres sauces y lanchas.
Así el amor y la locura son uno,
Se toman de la mano,
No hay pensamientos
Solo el espíritu suelto y hondo,
bailan sedientos de amor,
locura de dos.
Amor.
Vida,
sombrero
Hondo y mágico
encierra la locura.
Si respiras amor
las ventanas se abren
a la felicidad.
Amor y locura
cóctel de un licor
a veces,
embriaga,
Toda la vida,
Toda la muerte.