Le temo a la cruel distancia
¿Podrá hacer que el amor muera?
¿Será de pasión barrera?
¿Dejará mi vida rancia?
El amor fue la sustancia
que nos llenó de ternura
mas se acabó la ventura
porque tú te has alejado
y aquí de hinojos postrado
me envuelve la noche oscura.
Por las noches pierdo el sueño
mi alma se llena de angustia
y toda esperanza es mustia
debilitando mi empeño.
Del mundo me creí dueño
la vida fue jubilosa
con mi poética prosa
se portó bien el destino
hasta que me cambió el sino
desviando mi senda umbrosa.
La copa de nuestro vino
de pasión quedó vacía
perdió toda fantasía
¿Será un designio divino?
El ocaso fue el padrino
de románticas canciones
cuando en muchas ocasiones
gozamos a plenitud
los momentos de quietud
que nos dieron emociones.
En otros tristes momentos
lamentamos nuestras penas
y enfrentamos las faenas
uniendo los sentimientos.
Vimos los resurgimientos
cargados con la enseñanza
que fortaleció la alianza
de corazones amantes,
que disfrutaron flamantes
cada palmo de esperanza.
Mi corazón caviloso
ha perdido compostura
un triste presagio augura
sin paz, yace silencioso.
Me sigue algo misterioso
estoy dejado a la suerte
pero no quiero perderte
eres fuente de energía
el corazón que me guía
sin ti, prefiero la muerte.