En el frío de la madrugada,
sentí tu tibia mano
acariciando mi cara,
sabía muy bien que eras tú.
Un amoroso beso
depositaste en mis labios
callados,solo mi respirar
se escuchaba en el cuarto.
Quisé abrir los ojos
para mirar tu rostro,
pero no pude,solo en mi corazón
sentí tu presencia cerca.
Al fin,cuando desperté
y recordé ese beso
lleno de cariño,percibí
tu suave aroma en mi almohada,
indudablemente fuiste tú,
quien en la madrugada
me hizo sentir tan bello momento.
YOLANDA BARRY.