Salida como quien diría,
De la nada misma,
Tras de tus anteojos
Desafiante me mirabas.
De pronto de mi trance,
Despiadada me sacaste,
Me llamaste señor delegado,
Y toda magia murió
Luego resulto que poesía,
Tal y cual yo escribías,
Y mucho leías.
Amigos pronto fuimos, pero,
No todo se puede.
He de decir adiós, mi novia espera.