Ya llegué.
- Es tarde -
Sé que tienes sueño, pero me gustaría platicar como fue mí día.
Hoy en la mañana me desperté.
No estabas, te habías ido a las quince menos seis
Preparé el desayuno, como siempre almorcé sola.
-Está bien -
Dos cucharáditas de azúcar le agregué al café ....
Caminé tres cuadras hacia el portal,
donde pasan los camiones para tomar el metro.
No pasó ninguno... Se me olvidó
que hoy es; PRIMERO DE MAYO.
Regresé a la casa, tomé mis babuchas color vino.
Me coloqué en la sillíta para recuperar el día perdido...
Y empecé a redactarte esta anécdota de la ausencia de mi ala.