Madre no te ofrecí un lucero
porque no lo pude alcanzar,
pero te di todo el amor puro
que como hija te pude dar.
El cielo está brillando
no se quiere esconder,
y las nubes en lo alto
posan a tus pies,mujer.
Madre de mi corazón
fuiste mi inspiración
para escribir este poema
con bendita devoción.
Blanca flor de limonero,
bella dama ilustrada por
tu alegría y nobleza siempre
fuiste bien amada.